The perks of being a wallflower” - Una novela que de seguro te hará pensar acompañado de una buena canción o de algo más.

Quizás de la antología de literatura como Werther de Goete o El Guardián Entre el Centeno de Salinger aparece esta novela. Editada en 1999 por MTV Books bajo el título “The perks of being a wallflower”, que como muchos saben tuvo su adaptación al cine en 2012 a manos de la preciosa Ema Watson, nos viene a contar de cómo en el desaprender la sociedad y el mundo nos invita a crecer; de cómo en compañía se vive la verdadera soledad, esa que a veces, y solo a veces hay un alma con quien compartir. La pregunta a resolver, es si ese crecimiento es del alma o de las angustias de estar en sociedad. La historia escrita por Stephen Chbosky, relata la vida de Charlie, un adolesente de 15 años de primer año de preparatoria que se adentra a un mundo de chicos como él, más adultos, con algunos problemas ya resueltos y otros nuevos por fresolver. El relato de la novela donde conocemos a los hermanastros Sam y Patrick junto a su grupo de amigos que ya van en tercero, se nos presenta en formato epistolar a modo de diario, haciendo un símil a la hobra de Goethe, en que entre cada diálogo podemos encontrarnos con verdades como esta: —Me refiero a que no es como en las películas, donde a las chicas les gustan los gilipollas, ni nada parecido. No es tan fácil. Lo que les gusta son los chicos que les pueda dar un propósito. —¿Un propósito? —Exacto. ¿Sabes? A las chicas les gusta que los tíos sean un reto. Les da una especie de molde en el que encajar su actuación. Como una madre. ¿Qué haría una madre si no pudiera preocuparse por ti y hacer que ordenes tu cuarto? ¿Y qué harías tú sin que ella se preocupe por ti y te obligue a ordenarlo? Todo el mundo necesita una madre. Y las madres lo saben. Y esto les da un propósito. Entre cada escena, el pequeño Charlie saca las melodías que le acompañan en su vida: así The Smiths, de Ride, The Beatles, Nick Drake o FleetWood mac, nos van remeciendo a cada rato, donde hay solo una certeza clara: “supongo que somos quienes somos por un montón de razones. Y quizá nunca conozcamos la mayoría de ellas. Pero aunque no tengamos el poder de elegir de dónde venimos, todavía podemos elegir adónde vamos”. Y sí, Charlie yo por momentos también me siento infinito.
Acá la melodía que lo envuelve todo en la historia: incluso en medio de un túnel: Descubre el Libro Si no saben como leer este formato, pongan en su Firefox un complemento que se llama epubreader y lo podrán leer directamente desde este navegador https://addons.mozilla.org/es/firefox/addon/epubreader/

0 ¿Respuestas o reclamos?:

Publicar un comentario

Escribe lo que se te venga en gana